La cuarta entrega de la Toyota Highlander estrena plataforma, es más espaciosa, lujosa y segura que antes, al tiempo que ofrece un diseño de formas más agraciadas que antes.
Esta camioneta mediana de tres filas de asientos, si bien no participa en un segmento de gran volumen, sí es relevante por lo que representan, son los vehículos que las familias aspiran a tener.
Evidentemente, tiene una férrea competencia comandada por modelos como: Honda Pilot, Ford Explorer, Mazda CX-9, Nissan Pathfinder, Volkswagen Teramont y Chevrolet Traverse por mencionar a las principales.
Antecedentes
Tal y como sucedió un par de años antes con el lanzamiento de la primera RAV4, Toyota revolucionó el segmento de las SUV medianas con la introducción de la primera iteración de la Highlander en 2001.
Si bien, la firma ya contaba con un exponente en la categoría, la 4Runner, que encima gozaba de un éxito razonable, la Highlander optaba por una construcción de chasis monocasco con geometría de suspensión independiente en las cuatro ruedas, en lugar de la arquitectura de carrocería sobre chasis que era la más utilizada en aquel momento.
El resultado, la Toyota Highlander lucía como una camioneta, pero tenía la calidad de marcha confortable de un auto, una combinación tan ganadora que hoy en día son pocas las opciones que todavía son body on frame.
En nuestro mercado, conocimos por primera vez a la Highlander cuando se encontraba en su segunda generación y de inmediato se posicionó como una de las favoritas en un segmento que, pese a no representar grandes volúmenes, sí, cuenta con una gran cantidad de opciones de prácticamente todas las marcas.
La cuarta generación
Para 2020, la Toyota Highlander es completamente nueva, adopta la plataforma TNGA-K que ya utilizan modelos como la RAV4 o Camry más recientes, lo que trae mejoras en cuanto a rigidez estructural, maniobrabilidad, insonorización y refinamiento.
Aunque las dimensiones crecen marginalmente, hay notables ganancias en el interior debido a un mejor aprovechamiento del espacio. La Highlander 2020 mide 4,950 mm de largo y la distancia entre ejes es de 2,849 mm. El incremento entonces es de 60 mm tanto en ambas cotas.
Mecánicamente no hay cambios, el ya conocido V6 de 3.5 litros de inyección directa entrega los mismos 295 hp y 263 libras-pie de torque y nuevamente va emparejado a una rápida y suave transmisión automática de ocho velocidades que envía la potencia al eje frontal. Asimismo, la capacidad de arrastre es de hasta 2,260 kilogramos.
Lo anterior no quiere decir que Toyota se haya olvidado de las novedades en el apartado de tren motor, pero están reservadas para la variante híbrida que, teóricamente llegará a nuestro mercado más adelante y de la cual hablaremos a mayor profundidad en un artículo de primer contacto aparte.
Otro aspecto importante a destacar es que la Toyota Highlander 2020 será el primer vehículo que se ofrezca en México con el paquete de sistemas de seguridad Toyota Safety Sense 2.0 que se compone de elementos como: Control de crucero adaptativo, frenado de emergencia y asistente de mantenimiento de carril, sin dejar de ofrecer los obligados bolsas de aire, ABS, ESP y cámara de reversa.
El interior
Puertas adentro la nueva Toyota Highlander resultó una gran sorpresa, ya era un producto amplio y muy versátil, ambos valores que no solo mantiene, sino que mejoran. Pero en donde se nota un salto cuántico es en cuanto a calidad de materiales y ensamble, la atmósfera y experiencia adentro son muy superiores e incluso, podría asegurar que, en el caso de las versiones más equipadas, quedan a la par de modelos de marcas de lujo como Acura o Infiniti.
La conectividad llegó a Toyota ¡aleluya!
La pantalla central de 8” ahora es compatible con Apple Carplay y Android Auto, una asignatura que tenía pendiente la marca. Por su parte, en el clúster de instrumentos hay otra pantalla configurable también de 8” y por último, tenemos un enorme Head Up Display a color de 10”.
Seguramente ya habrás notado en las fotos esa inmensa pantalla central, bueno para que lo sepas, es de 12.3”, la resolución es impresionante y la funcionalidad es muy buena, pero no va a llegar a nuestro país, por lo menos de inicio.
En cuanto al equipamiento no falta nada, techo panorámico, asientos forrados en piel, la segunda fila ya tiene asientos tipo capitán y se recorren 30 mm más que antes, climatizador automático de hasta 3 zonas, calefacción y enfriamiento para los asientos volante multifunción, cargador por inducción y algunas cosas más. Ah y no puedo dejar fuera el equipo de audio firmado por JBL de 11 bocinas y 1,200 watts.
La tercera fila ofrece ligeramente más espacio también y si los asientos de la segunda están ubicados a una distancia media, un adulto no muy alto va a poder acomodarse sin mayor problema, eso sí, no esperes la comodidad que te da la tercera banca de una Sienna, para eso, nada como una minivan, nos guste o no.
Manejo
El V6 de 3.5 litros es ya un viejo conocido, es cierto que ha recibido algunas actualizaciones, pero en términos generales es el mismo que conocimos allá en 2007 cuando se lanzó en México la Highlander. Y aun con lo anterior, sigo creyendo que es uno de los secretos mejor guardados de Toyota, tiene una entrega de potencia progresiva, lineal y en la banda media de giro, siempre tiene par suficiente para mover la masa de 1,980 kilos de la Highlander 2020 con soltura, no esperes aceleraciones de deportivo, no es la idea, pero tiene potencia más que suficiente cuando la necesitas.
Dicho en pocas palabras, es un gran motor a la vieja escuela. Aunque en un mercado de hibridación y downsizing, ya se le nota la edad.
La principal responsable de que el V6 sea capaz de cumplir cabalmente con su trabajo es la transmisión automática de 8 velocidades, que es virtualmente perfecta, de transiciones suaves, rápida y siempre encuentra la relación adecuada que mejor explota el torque.
El binomio motor – transmisión funciona con mucha suavidad y si a eso sumamos el excelente aislamiento acústico producto cristales más gruesos y mayor cantidad de materiales aislantes, tenemos una cabina muy silenciosa, quizá la referencia de la categoría en ese sentido.
Por su parte, la suspensión tiene un ajuste orientado al confort, aunque como ya hemos constatado con todos los productos que utilizan la arquitectura TNGA, se deja llevar mejor de lo que pensarías en caminos con curvas transmitiendo confianza en todo momento. ¡Va muy bien plantada!
Conclusión
La Toyota Highlander 2020 inicia ventas en las primeras semanas del año entrante, como decía anteriormente, de momento únicamente V6 con tracción delantera. Aunque si todo sale como hasta ahora, no debiera pasar demasiado tiempo antes de que veamos a la variante híbrida complementar la gama, tal y como ha sucedido con Camry, Corolla y RAV4.
Es más silenciosa, cómoda, espaciosa, práctica y segura que antes, además de presumir un diseño menos agresivo y por lo menos desde mi punto de vista, más afable. Pero todo lo anterior no es lo que más destacado, ya que la experiencia en el interior mejoró sustancialmente, mientras que el manejo si bien no deja de estar enfocado en el confort, permite un manejo más divertido y gratificante que antes.
Un combo que debería resultar casi irresistible para las familias que requieren de una camioneta de tres filas de asientos.