El Onix es un modelo tan importante para Chevrolet que, para su segunda generación, dejó de ser un producto exclusivo de Sudamérica para volverse un auto global dirigido a mercados emergentes como China, Brasil y México. De hecho, su producción y comercialización en nuestro país está más que confirmada e incluso ya hasta sabemos cuáles son las versiones y motorizaciones a ofertarse. Pero también, es un hecho que este auto ya se hizo del rogar de más, por lo que aprovechamos su lanzamiento en Argentina para conocerlo antes que nadie.
Ok, el auto que manejamos es un Onix Hatchback fabricado en Mercosur, que si bien no está confirmado para nuestro mercado (al parecer la oferta se limitará a la carrocería sedán), este primer contacto sirve para darnos una fuerte idea de lo que veremos en México. Aquí nuestras primeras impresiones:
Motores
En Argentina, las versiones de acceso del Chevrolet Onix son impulsadas por un motor L3 1.2L 12V con 90 Hp y 85 libras-pie, con caja manual de cinco velocidades. Esta configuración no llegará a México. Caso contrario al motor L3 1.0L Turbo capaz de entregar 116 Hp y 118 libras-pie de par, que se asocia a cajas: manual de cinco o automática de seis relaciones, que fue la que pudimos manejar.
Comportamiento dinámico
Lo primero que te puedo decir es que casi no se perciben las vibraciones propias de los motores con tres cilindros. La marca nos comentaba que trabajó mucho en reducirlas y en impedir que se propaguen al interior.
Lo segundo que vas a notar es que el andar es muy suave ¿esto quiere decir blando? no, pero si bastante equilibrado con un trabajo redondeado, que absorbe la mayoría de las asperezas.
La dirección también hace un progreso exponencial, en lugar de la asistencia hidráulica anterior, el nuevo sistema eléctrico la vuelve ligera y directa. Ojo, a baja velocidad peca de sobreasistida y te hace perder algo de precisión, pero ya en velocidad alta corrige esta actitud.
Hablando de manejo en carretera, el nuevo Chevrolet Onix se puede sentir un poco nervioso (yo creo que es por la dirección con menos de 3 giros de tope a tope) y deja filtrar algo de ruido, pero en términos generales, viaja bien plantado e insonorizado.
A muchos les preocupa que el motor sea muy chico, e incluso esos 116 Hp que declara les saben a poco, pero tiene trucos como la apertura variable de válvulas y el turbo.
En la vida real el resultado se siente, en ciudad tienes el típico comportamiento de los turbos de baja cilindrada, si pisas fuerte al acelerador tienes que esperar un instante a que la caja haga su trabajo para salir con un empuje tan constante que parece eléctrico. Incluso, si no vas tan fuerte, el empuje también es muy bueno y sin fisuras.
En carretera también tienes una buena entrega de torque, para que te hagas una idea, el 80 – 120 km/h lo hace en 8 segundos en D, y si bajas a 4º recortás medio segundo. Tema a parte, la caja no tiene modo secuencial tradicional, sino una posición L que retiene los cambios para mejor empuje.
Datos útiles
Este motor usa correa de distribución en baño de aceite, todo sellado del polvo, para ofrecer una vida útil de 240,000 km. Además la marca dice que redujo la cantidad de piezas móviles para reducir desgaste y mantenimiento.
En Argentina, el nuevo Chevrolet Onix incluye ESP y seis bolsas de aire. Completan los anclajes Isofix. Si a eso le sumas la nueva estructura que es más rígida obtienes un resultado de 5 estrellas en protección de adultos e infantes en las pruebas de LatinNCAP. El modelo mexicano debería de mantenerse igual de seguro.
Interior
Puertas adentro el nuevo Onix cuenta con un diseño simétrico. Una de las grandes novedades está en que la pantalla ahora es semiflotante. Los plásticos son simplemente correctos mientras que las uniones son muy buenas. Se agradecen los insertos en el tablero en un tono marrón-amarillento.
La posición de manejo es correcta. El respaldo se siente algo estrecho y duro, pero ofrece buena sujeción. El cuadro de instrumentos abandona el diagrama analógico/digital por un estilo convencional con dos indicadores de agujas (algo pequeños) y un display en el centro.
Espacio y cajuela
Sin ser el mejor del segmento, atrás hay buen espacio para cabezas y rodillas. Para ser un hatchback, consideramos que con 275 litros la cajuela es amplia. Lamentablemente la llanta de refacción es temporal.
Conclusiones
Si bien, esto es un pequeño tentempié de lo que veremos en México, te puedo decir que el Onix ha hecho una evolución formidable, es un auto muy refinado y sobre todo está en lo más alto de seguridad dentro de su segmento y en toda la gama. Además, este 1.0 Turbo es una delicia, sin duda, el Nissan Versa tiene un motivo por el cual preocuparse.