Desde 2004, la división deportiva de Cadillac nos ha entregado a los productos más extremos y orientados al performance de la marca norteamericana. Pero hasta ahora sólo la gama alta de autos había recibido el tratamiento que normalmente consta de un motor más potente, suspensión deportiva, equipamiento, look más agresivo y una puesta a punto como la de vehículos de las divisiones AMG de Mercedes-Benz, M de BMW y RS de Audi, por ejemplo.
En el Autoshow de Los Angeles 2014, Cadillac presentó un nuevo integrante de la familia de modelos V Series y es que finalmente, su sedán/coupé de tamaño compacto recibió el tratamiento deportivo. De esta forma nació el Cadillac ATS-V 2016 que finalmente llega a nuestro mercado en sus dos configuraciones de sedán y coupé.
En la parte exterior encontramos una serie de modificaciones que le otorgan una presencia más impresionante y deportiva. Entre ellas destacan las nuevas fascias con tomas de aire más grandes, parrilla, salidas de aire en el cofre, cofre abultado, rines exclusivos para la versión de 19 pulgadas, calipers de los frenos que pueden pedirse en colores, alerón incluido en la tapa de la cajuela, faldones laterales y un difusor trasero flanqueado por dos salidas de escape.
El interior está dotado de todo el equipamiento posible de un ATS pero con algunos elementos que denotan su tono más orientado al manejo deportivo como los asientos de cubo de la marca Recaro, pedales deportivos, alcántara para muchas partes del interior y los emblemas con la V que nos dicen que se trata de un verdadero deportivo de la marca.
En el tema mecánico, encontramos que el motor de cuatro cilindros turbo del ATS “a secas” fue sustituido por un V6… de 3.6L, Biturbo que entrega nada más y nada menos que 464 Hp y 445 Lb-pie de torque a las ruedas traseras mediante una transmisión automática de ocho velocidades –con paletas de cambio en el volante- (también existe una manual de seis pero ésta no llegará a nuestro mercado).
La suspensión también fue cambiada y ahora cuenta con Magnetic Ride de tercera generación que es un 40% más rápida para amortiguar y que constantemente lee el camino para reaccionar en milésimas de segundo a las condiciones del camino.
El resultado es realmente asombroso, un deportivo pura sangre con un tiempo de aceleración de 0 a 100 Km/h de ¡sólo 4 segundos! Y una velocidad máxima de casi 300 Km/h (299 para ser más precisos).
Dentro de las amenidades interiores encontramos el sistema de info-entretenimiento llamado Cadillac User Experience (Cadillac CUE) que consta de una pantalla al centro del tablero sensible al tacto desde la cual podemos controlar el GPS, el sistema de Audio Bose de 10 bocinas, la conectividad con el teléfono, control de clima y si conectamos un dispositivo Apple también aparecerá el Apple CarPlay para controlar lo relacionado con el teléfono de forma integral; eso sí nada se dijo de su compatibilidad con Android Auto en la presentación. Otra cosa que encontramos es el Performance Data Recorder que mediante la cámara frontal y los acelerómetros graba cuando estamos en una pista el recorrido, mostrando además los momentos de aceleración y frenado para poder examinarlo después en la computadora y así mejorar nuestros tiempos en el circuito.
Nuestras primeras impresiones
Durante el evento de lanzamiento del Cadillac ATS-V 2016 en Las Vegas, Nevada, pudimos convivir un poco con el auto. Desgraciadamente los absurdos límites de velocidad en nuestro país vecino no nos dejaron disfrutar a rienda suelta del motor, pero debemos decir que con todo y todo tuvimos algunos espacios para “portarnos mal” y así sentir un poco más el auto.
Fuimos de los pocos medios afortunados en manejar la versión con la caja manual de seis velocidades y la verdad es que es una lástima que no esté disponible pues los tiros son bastante precisos y resulta muy gratificante poder manipular de mejor manera estos 464 caballos.
La dirección se siente bien… a secas, pues creemos que no transmite tan bien lo que sucede con las ruedas delanteras. Eso sí, se percibe muy bien plantado en las curvas y con muy buen agarre. En este sentido, si lo comparamos contra el BMW M3/M4 –que es definitivamente su competidor frontal tanto en precio como en prestaciones- se siente mucho menos nervioso de la parte trasera, mejor plantado y que desquita mejor la tracción de las llantas (Michelin Pilot Sport).
Al presionar el acelerador, obtenemos una aceleración muy progresiva, sorprendentemente progresiva de hecho para ser un motor turbo cargado, además de un torque impresionante en todo el rango de revoluciones. Encontramos además, modos de manejo que van desde un Confort, hasta un Track donde todo se vuelve más extremo y pasando por un Sport que es como el punto intermedio. Se percibe muy bien la diferencia entre cada uno, endureciendo la dirección, la amortiguación y afinando la respuesta del pedal derecho.
Los frenos son también impresionantes, pues todos son de disco y firmados por Brembo, con seis pistones adelante y cuatro para atrás, por supuesto están apoyados del sistema ABS.
Por otra parte, encontramos también algunos aspectos negativos como el espacio interior tanto para las plazas delanteras como traseras pues nos sabemos si es por los asientos de cubo, pero la cabina se siente un poco encerrada y si viajas atrás, no puedes meter los pies debajo de los asientos delanteros y el túnel de la transmisión quita mucho espacio, de hecho podemos decir que es un cuatro plazas pues también el auto se siente angosto.
Creemos que será un auto muy divertido de conducir y que sin duda será muy competitivo contra sus rivales alemanes como el BMW M4 y el recién estrenado Mercedes-AMG C63 S. Nosotros ya ansiamos poder manejarlo más a profundidad y en una pista.