
En el Salón del Automóvil de Frankfurt de 1997, Daimler AG sorprendió al mundo con un automóvil que marcaría un hito en la historia: el smart City Coupé, precursor del fortwo. Sin embargo, la historia de estos vehículos urbanos comenzó mucho antes.
A mediados de los años 70, los ingenieros de Mercedes-Benz se propusieron crear el "auto del futuro", pensado para adaptarse a las nuevas necesidades de las ciudades. Así nació el concepto NAFA (acrónimo de Nahverkehrsfahrzeug, que en español significa "vehículo de transporte local"), un automóvil con solo 2.50 metros de largo y 1.50 metros de ancho.
Este diseño fue realizado por Bruno Sacco, quien también sería el encargado de crear el Mercedes-Benz Clase A. El NAFA reflejaba el estilo minimalista y funcional que caracterizaba los años 80, con líneas rectas, un parabrisas inclinado a 45 grados, amplias superficies acristaladas, puertas corredizas y una luneta trasera vertical.
Además de su particular diseño, el NAFA fue el primer Mercedes-Benz con tracción delantera, y su característica más impresionante era la dirección a las cuatro ruedas, que le otorgaba un radio de giro de solo 5.7 metros, lo que le daba una maniobrabilidad excepcional en los espacios más reducidos, como las estrechas calles de Caracas.
El biplaza montaba un motor tricilíndrico de 1.0L con 40 caballos de fuerza, ubicado en la parte delantera y con una transmisión automática, lo que lo hacía perfecto para trayectos urbanos cortos.
Aunque el NAFA nunca pasó a producción, su diseño inspiró tanto al futuro Clase A como al Smart ForTwo, tomando elementos como la célula de seguridad y el chasis de doble fondo.