Tras varios años de la ausencia de noticias entorno al próximo supercoche de la firma de la estrella, ahora sabemos que ya se encuentra en su fase final de pruebas, gracias a unas fotografías espía que lo dejan ver aún, con una extensa capa de camuflaje.
Recordemos que el modelo se develó en el año 2017 bajo el nombre de Project One, haciendo uso de un motor de F1 inspirado en el monoplaza Mercedes-AMG W06, que hizo campeón a Lewis Hamilton por tercera ocasión en la máxima (2015).
El motor está a cargo de un bloque V6 de 1.6 litros capaz de generar 750 caballos de fuerza, complementado por dos motores eléctricos montados en el eje delantero, uno más en el cigüeñal y un cuarto con turbocompresor eléctrico que logran en conjunto alrededor de 1,000 caballos de fuerza, logrando el 0 a 100 km/h en 2.5 segundos y con una velocidad máxima de 354 km/h.
En ese momento, el entonces jefe de AMG, Tobias Moers, afirmó que se requerían 18 meses de desarrollo para llevarlo a producción, sin embargo, un año después, se supo que los ingenieros tenían problemas para cumplir con los estándares de emisiones impuestas para el mercado europeo.
Otro de los temas a destacar es que al inicio, el regimen a ralentí del motor rondaba las 5,000 rpm, una cifra bastante elevada que se logró reducir a tan solo 1,200 rpm. Dicha hazaña parece haber llevado bastante tiempo, cuestión que impactó de igual forma, en el importante retraso que tuvo el desarrollo.
Ahora, parece que todo está solucionado y la última fase de pruebas ya se encuentra en proceso, en donde los desarrolladores se encuentran afinando los últimos detalles en temas de aerodinámica, que lo harán ponerse a tono para competirle a su rival más cercano, el Aston Martin Valkyrie.
Los clientes que ya lo adquirieron, podrán esperarlo durante el próximo 2021, según palabras del propio Moers, mismo que dejó su cargo en 2020 para convertirse en el flamante CEO de la compañía Aston Martin.