Desde hace meses la Unión Europea está buscando una forma de frenar la entrada de autos eléctricos chinos a los países que la conforman debido a los precios tan bajos que manejan que han afectado directamente a las marcas locales. Por ello mismo la Unión Europea lanzó una serie de investigaciones que buscarían revelar las prácticas que consideran como desleales ante el resto de la competencia global.
En el capítulo más reciente de este drama, SAIC, la propietaria de MG, ha recibido una alza en los impuestos que deben pagar para llevar sus productos a suelo europeo. De hecho, esta alza ha sido mucho más alta que la que recibieron otras marcas como BYD y Geely.
Para SAIC y sus marcas, el impuesto es de 36.3% sobre el 10% que ya existía. Mientras que para Geely, sobre ese 10%, la UE aumentó otro 19.6% los impuestos. En el caso de BYD, su aumento fue de otro 17%.
El motivo para que SAIC recibiera tantos impuestos extra es porque la Unión Europea clasificó la información que entregaron como “altamente deficiente”. A esto SAIC respondió que los cuestionarios que les envió la Unión Europea en un inicio eran mucho más claros y no solicitaban información sensible sobre su operación, proveedores, ayudas recibidas por el gobierno chino, e incluso la composición química de las baterías de sus autos eléctricos. Por esto último comenzaron a reservarse parte de la información.
Incluso, representantes de SAIC declararon a medios como Bloomberg que temían por la seguridad de su información, pues podía ser filtrada a empresas europeas.
De cualquier forma, la batalla por la expansión y la supervivencia en la industria automotriz, está en su punto más alto desde hace décadas, pues con el actuar de las marcas chinas, podríamos estar ante un punto de inflexión en la forma en la que se hacen negocios dentro de esta industria.
En respuesta a las investigaciones de la Unión Europea sobre la industria automotriz china, el país asiático ha lanzado una investigación contra varios productos fabricados en diversos países de Europa como una medida que busca presionar comercialmente.
Este tipo de acciones no solo sucede en Europa. Recientemente se dió a conocer que Canadá también aumentará el impuesto a todos los autos chinos que quieran entrar a su mercado en un 100% a partir del próximo 15 de octubre de 2024.
