Manejamos la Honda XR190L, ideal para cualquier condición de terreno

Tras haber tenido el primer contacto con ella el pasado mes de marzo, cuando Honda nos la presentó en su pista de tierra en El Salto, Jalisco, donde es ensamblada, pudimos probar la XR190L en un ambiente controlado y diseñado especialmente para conocer sus características principales, sobre todo aquellas de manejo extremo; pero no habíamos tenido la oportunidad de tenerla en un día a día para conocerla más a fondo y experimentar esa propuesta interesante que nos ofrece sobre su modelo 150.

Nos encontramos con una motocicleta doble propósito fabricada sobre un marco de acero, de aspecto ágil y dinámico con buenas terminaciones por donde quiera que se le vea, de apariencia actual conjuntando detalles muy clásicos y característicos de la marca, como rines de rayos con acabado cromado y los espejos circulares. El asiento, forrado en vinipiel, con las letras de la marca a los costados en color blanco muy agradables a la vista y con la capacidad para llevar a un pasajero cómodamente pues cuenta además con unos insertos tubulares en los laterales con los que se sujetará sin problema. En la parte de instrumentos, contamos con lo básico, llevando un cluster sencillo, pero con los elementos necesarios, mismo que, por cierto, comparte con su hermana menor 150 siendo totalmente análogo integrando velocímetro, odómetro e indicador de combustible.

Las salpicaderas y paneles laterales están fabricados en plástico ABS de alta resistencia, decorados con gráficos combinados alusivos al nombre y modelo, además de pequeños detalles en imitación fibra de carbono que, si quieres verlo de forma positiva, son los mismos usados en algunos componentes del Civic Type R.

Suave, precisa y potente, así es como se define la XR190L. Lo primero a destacar es que, comenzamos con un manejo de sensación ligera, fácil de maniobrar, con cambios de velocidad muy precisos y casi imperceptibles. Al ser un doble propósito, cuenta con una suspensión muy suave, la delantera de horquilla telescópica que absorbe de forma eficiente grandes impactos, por lo que baches, zanjas y topes, serán de risa, pues recordemos que en la prueba sobre caminos no pavimentados se comportó increíblemente bien hasta en esas partes donde había material muy suelto, aun con las llantas de uso mixto con las que viene de serie, por lo que la ciudad será comodidad pura y tendremos una gran experiencia de manejo.

La XR190L es impulsada por un motor fuel injection, monocilíndrico de cuatro tiempos enfriado por aire de 184 c.c. OHC de 2 válvulas, conjuntado a una caja manual de 5 marchas, entregando 15.6 hp a las 7,500 rpm y una velocidad máxima de 110km/h. Realmente se notan estas mejoras al percibir inmediatamente el refinamiento en sensaciones con respecto a la 150, pues como ya te habíamos comentado anteriormente, esos 34.4 c.c. adicionales hacen la diferencia tanto en arranque, respuesta, potencia, así como la notable reducción en vibraciones y sonido, el cual es muy agradable y en ningún momento llega a ser molesto. El sistema de frenado ofrece disco delantero y tambor atrás, al que, por cierto, no le vendría nada mal ser actualizado a disco. El tanque de combustible tiene una capacidad para 12 litros con un rendimiento de aproximadamente 39km/l.