Queda poco que decir sobre el Audi E-tron que no hayamos dicho ya, a estas alturas sabes que una y otra vez he sostenido que es el mejor SUV eléctrico del mercado, punto.
Y sí, estoy considerando opciones como el Mercedes-Benz EQC o el Tesla Model Y, que muy forzado (porque parece más un hatch sobredimensionado), pero también podemos catalogar como camioneta. Hay varios exponentes más, que puedes adquirir en nuestro mercado (Jaguar o JAC), pero créeme cuando te digo, ninguna se acerca ni tantito a la experiencia que un Audi E-tron te va a entregar.
Audi E-tron Sportback: Las expectativas no cumplidas
El problema radica en que el mercado parece no estar listo para optar por un auto eléctrico. El consumidor cruza la puerta del distribuidor, o más bien, entra a la página de la marca y se da cuenta que por la misma inversión, se puede llevar una Q7 o una Q8. Sobra decir cual es la elección más común.
Con los eléctricos todo se reduce a que la autonomía anunciada sea superior a la distancia requerida, los eléctricos no logran cubrir con una carga los citados trayectos. Sucede igual que con los autos de combustión, no existe uno solo que en condiciones reales, logre las cifras de consumo oficiales.
El Audi E-tron, con su batería de 95 kWh anuncia una autonomía de 446 km, pero el camino de México – Acapulco es de apenas 381 km. Si, pero hay que considerar que no es plano, de hecho, hay bastantes pendientes y ese rango es en condiciones óptimas de funcionamiento, hay que agregar a la ecuación aspectos como la temperatura, hábitos del conductor y un largo etc.
Audi E-tron Sportback: La contundente realidad
¿Lo anterior hace menos bueno al Audi E-tron? Absolutamente no, sigue siendo un producto espectacular; es rápido, silencioso, refinado, sofisticado y moderno. No se puede pedir mucho más, créeme.
En situaciones de uso diario, es decir, los recorridos de rutina (casa a la oficina, al súper o a cualquier otra actividad), no vas a necesitar recargar tu Audi E-tron más de una vez a la semana, por lo menos así fue en mi experiencia. Y el costo de hacerlo será sustancialmente más bajo que el de llenar un tanque de gasolina. Con lo cual, si instalas un cargador de 220 Volts en casa, no deberías tener ningún problema.
Pero aun con lo anterior, y con el hecho de que rara vez requerimos desplazarnos más 400 km de un solo jalón, el no poder hacerlo cuando quieras y como quieras, causa ansiedad e incertidumbre a los potenciales compradores. Entonces es un tema de infraestructura y tiempos de recarga, quizá nuestros amigos de Audi deberían ofrecer una política de préstamo de una unidad a gasolina equivalente cuando el propietario de un eléctrico así lo requiera.
Y digo equivalente para que no salgan con que te mandan un A1 para que te vayas a recorrer el país. No tengo nada en contra del pequeño subcompacto, por el contrario creo que es un gran producto, pero si tienes un E-tron, no estamos hablando del mismo nivel de coche.
Audi E-tron Sportback: Sofisticada y moderna experiencia
Por fin tuve oportunidad de convivir por varios días con el e-tron que tiene cámaras en lugar de espejos retrovisores, en las ocasiones anteriores fue poco tiempo y por lo tanto me quedaba una sensación de incomodidad. Pero luego de varios trayectos, te acostumbras perfectamente, esto es particularmente importante porque la pantalla OLED no está posicionada exactamente igual que un espejo tradicional, pero no resulta complicado habituarse a su uso y eso sí, en condiciones de baja visibilidad como de noche o con lluvia, las cámaras te permiten ver mucho mejor de lo que habrías soñado con cualquier espejo.
Lo mismo sucede con las impresionantes luces matrix LED, no sabes el potencial de mejora de visibilidad en la noche, hasta que lo experimentas. Se trata de un micro espejo digital, más bien un chip que contiene 1 millón de espejos pequeñísimos (centésimas de milímetro) que con la ayuda de campos electrostáticos puede ajustarse hasta 5 mil veces por segundo. Esto permite manipular la iluminación frontal a placer, se pueden crear animaciones, incluso proyectar texto. Pero lo verdaderamente importante es que se tiene control total para determinar que secciones se deben iluminar y con qué intensidad, y también cuáles no. Está impresionante.
Además no debemos olvidar de una calidad de materiales y ensamble soberbia, el sistema de info entretenimiento MMI Touch, que se compone de dos pantallas táctiles de altísima resolución y que puede desplegar los mapas directamente de Google Earth, el clúster de instrumentos digital, climatizador automático de 4 zonas y un larguísimo etc. Hacen de cada trayecto una gran experiencia tecnológica.
Audi E-tron Sportback: Manejo
Tras el volante, ya lo habíamos comentado, el Audi E-tron es magnífico, la suspensión neumática adaptativa puede ser suave, aislada y confortable o bien con cambiar el modo de conducción, se puede hacer rígida y más baja.
No se endurece tanto como para causar incomodidad, más bien es una firmeza que le permite controlar el balanceo de la carrocería y transmitir mucha confianza para ir a buenos ritmos, pero aun así, seguir siendo cómoda para recorridos más largos. Al llevar en el piso la batería, va plantadísimo, es súper estable y además es muy ágil.
El Audi E-Tron Sportback es rápido, 0 - 100 km/h en 6.6 segundos gracias a sus dos motores (uno en cada eje) que entregan 355 hp y 413 lb-pie de par. Sin embargo, con la función “Boost” disponible por 8 segundos, la potencia se incrementa hasta 402 hp, el torque hasta las 489 libras y entonces esa misma velocidad se logra en apenas 5.7 segundos. Nada mal para un SUV familiar mediano.
Audi E-tron Sportback: Conclusión
Reitero una vez más, el Audi E-Tron es el mejor SUV eléctrico que puedes comprar, tiene un balance insuperable entre sofisticación, diseño, manejo, tecnología y experiencia en el interior. Simplemente fantástico.
El reto entonces no está en el producto, ya que Audi nos ha demostrado una vez más que su E-tron es un auto de lujo excepcional y al mismo tiempo, perfectamente utilizable para la rutina diaria, sin demanda de ningún sacrificio.
El problema es esa ansiedad que genera el no poder hacer largos recorridos sin el inconveniente de parar a recargar (si es que está la opción) y además, tener que hacerlo durante un tiempo considerable. Y conociendo las prioridades de nuestro gobierno, suena difícil que la infraestructura de cargadores rápidos vaya a crecer rápidamente, o quedará en manos de la IP, resolver el asunto, algo que por ejemplo Tesla ha venido atacando de manera muy frontal desde el primer día que abrió operaciones en México.