Por más que ciertos tipos de carrocerías estén de moda y luego terminen su popularidad para pasar su estafeta a otro estilo de vehículos, las pickups parece que tienen perpetuidad en el gusto de la gente. Lo único que ha pasado durante más de siete décadas es que se han ido adaptando a las necesidades y gustos de los consumidores.
No obstante que la naturaleza de las pickups es el uso rudo y para carga, éstas se han ido diversificando con el paso del tiempo para abarcar diferentes sectores. Y es que al ver que la gente busca esta clase de vehículos sin la necesidad de tener que rodar en el campo o de transportar mercancías, los fabricantes de automóviles han desarrollado versiones con un nivel de equipamiento y/o desempeño que están a la par o inclusive mayor a un auto premium.
Pick ups de alto desempeño
Además de desarrollar pick ups de lujo, en los últimos años surgió un subsegmento enfocado para aquellas personas que buscan una conducción fuera de serie cuando no se está en el asfalto. Luego de ver como la cantidad de dinero que invierten los propietarios para equipar sus unidades con un arsenal de accesorios que les permitan comportarse como si fuera un Jeep, Ford tuvo la idea de vender una camioneta así de fábrica: la Raptor.
Pues bueno, fue tal el impacto que tuvo esta versión que, al tiempo, la competencia no dejó pasar la oportunidad y entró al ruedo con sus respectivos jugadores. Obviamente, quien no se podía quedar atrás en esta rivalidad, más por el segundo mayor fabricante de pickups en el mundo, es General Motors, y por partida doble.
All Terrain 4
Aprovechando la aparición de las nuevas generaciones del Chevrolet Cheyenne y GMC Sierra, hizo su aparición una variante enfocada al off-road de alto desempeño: TrailBoss y AT4, respectivamente. Aunque las dos opciones tienen mucho en común, la que más sobresale es la Sierra, pues es si bien las dos tienen la capacidad subir, descender o atravesar terrenos complicados, o rodar alta velocidad sobre terracería lo hace con gran desenvolvimiento, esta pickup ofrece un alto nivel de lujo. Vaya al final no deja de ser una GMC, por muy enfocada que este a rodar por tierra, lodo, rocas y aren.
Para nadie es una sorpresa que una pickup tenga las bondades de hacer off-road, sobre todo aquellas que tienen tracción en ambos ejes. Pero aun con el equipamiento básico para el 4x4 -bloqueo de diferencial, reductora- existen terrenos en los que sería difícil cruzar o bien habría que no ir tan rápido para evitar el brincoteo.
Off-road al más no poder
En el caso de las pick ups de alto desempeño como la Sierra AT4 esto no existe. Resulta increíble como en un terreno en el que un sedán tendría que ir a vuelta de rueda o incluso una pick up debería de tomar las cosas con cautela, al ir a bordo de la GMC la palabra límite amplia se ve ampliada, por lo que es posible ir más allá de lo habitual.
Junto al equipamiento extra que permite ir a caminos difíciles, la carrocería obtiene una mayor altura con respecto al suelo, esto con el objetivo de poder sortear obstáculos más grandes. Igualmente, la sensación de manejo es superior vayamos o no en un recorrido off-road. Todo en conjunto hacen que esta versión AT4 sea mucho más ágil si se compara con la Sierra Denali, por ejemplo.
Más allá de las aptitudes de pasar por terrenos complicados en los que tal vez solo un Wrangler lo podría hacer, la GMC Sierra AT4 tiene un atributo más, y rodar a altas velocidades en caminos de terracería. Gracias al sistema de suspensión compuesto por un kit de amortiguadores Rancho, la absorción de las imperfecciones del camino son perfectas al grado que jamás se pensaría que se pasó por encima de rocas, hoyos o protuberancias en el camino.
Quizá la Ram 1500 ofrezca un comportamiento similar gracias al sistema de suspensión de resortes, sin embargo, la competitividad de off-road extremo no es la misma a la que entrega la Sierra AT4, a su vez, no hay nada como los muelles si lo que también se desea es utilizar esta pickup para las labores de carga.
Junto al sistema de suspensión y la elevación de la carrocería, esta Sierra AT4 equipa de rines de 20 pulgadas, los neumáticos todoterreno, caja de transferencia de dos velocidades, bloqueo del diferencial trasero, placas de deslizamiento, control de descenso de pendientes y selector de modos de manejo de terreno. Claro que todo esto no se lograría de no ser por el motor V8 de 5.3 litros con 355 hp y 383 libras-pie de torque, y una caja de ocho velocidades no tiene límites al rodar fuera del asfalto.
A simple vista
Del lado estético, esta versión luce más agresiva al eliminar las decoraciones en cromo de la carrocería. En el interior, hace uso de elementos decorativos de aluminio, madera y cuero, un display digital de 8 pulgadas en el cuadro de instrumentos, una cámara de 360 grados con modo 3D, espejo retrovisor digital, cargador inalámbrico para teléfonos celulares, sensor de colisión frontal con frenado automático a baja velocidad, asientos frontales calefactables y ventilados. Un elemento sumamente relevante y que no podemos deajr de mencionar es la puerta modular de la batea.
Volviendo a lo que mencionábamos al inicio, es increíble como un vehículo que fue ideado desde su concepción para rodar en terrenos agrestes puede salir avante de ellos, pero por dentro disponer de todo el lujo y equipamiento de un vehículo premium. Así lo mejor de dos mundos.