La firma de los cuatro aros tuvo un primer cuatrimestre muy intenso, luego de algunos retrasos, por fin pudo introducir en nuestro mercado los nuevos Audi A8, Audi Q8, Audi A6 y por último el Audi A7, que es el que hoy nos ocupa y desde mi punto de vista el que mejor representa a la marca.
Es cierto que no es el buque insignia, ese estatus le pertenece indiscutiblemente al A8, sin embargo, el A7 es el abanderado en materia de diseño, ese modelo que mejor interpreta la filosofía de diseño actual de la marca, al tiempo que es un auto de gama alta en toda la extensión de la palabra, y como no puede faltar en un Audi de gran calado tiene tracción quattro, al tiempo que incorpora con las tecnologías más modernas disponibles en el Grupo Volkswagen.
así se ve el #nuevoaudiA7 rodando en carretera... Les gusta? @AudideMexico pic.twitter.com/kTBsNBc9Ma
— Autocosmos México (@Autocosmos) 2 de abril de 2019
Planteamiento mecánico ya conocido
Al igual que sus hermanos que conforman la gama alta de Audi, es decir los ya mencionados A8, Q8 y A6, el A7 emplea un V6 de 340 hp y 369 lb-pie de torque asociado a una transmisión S-Tronic de 7 cambios y que envía la potencia a las cuatro ruedas vía el sistema de tracción quattro. Siguiendo esa lógica absolutamente ilógica de los nuevos nombres de la firma, el A7 es 55
Dicha planta de poder le permite al Audi A7 2019 hacer el 0 – 100 km/h en 5.3 segundos y alcanzar una máxima de 250 km/h, nada mal para un titán de 1,890 kilos.
Nuevamente, al igual todos los modelos antes señalados, el A7 utiliza un sistema micro híbrido, que le ayuda a mejorar ligeramente el rendimiento de combustible. Ya hemos hablado bastante de cómo funciona este sistema.
Se trata de un motor eléctrico que disminuye la carga del motor de combustión en algunos momentos para así disminuir mejorar emisiones y consumos. Entonces, el Start & Stop puede funcionar de manera mucho más amplia, por ejemplo, puede apagar el motor de combustión al rodar por debajo de los 22 km/h y mantenerlo así por hasta 40 segundos. El sistema está conectado a los radares y cámaras del vehículo para por ejemplo al detectar movimiento del auto que está enfrente, encender el motor de combustión de forma anticipada.
Si bien, la mejora de rendimiento es marginal, el Audi A7 2019 es para efectos de nuestra regulación un híbrido y por lo tanto no paga ISAN y puede obtener holograma de verificación verde.
Adicionalmente, el sistema de eje trasero direccional está disponible como opción, por la módica suma de 25 mil pesos, con lo cual queda que es una característica obligada. Este sistema permite mejorar la maniobrabilidad a bajas velocidades y reducir el radio de giro hasta en 1.1 metros al mover las ruedas posteriores hasta en 5° en contra del movimiento de las delanteras.
Mientras que, en altas velocidades, las ruedas traseras se mueven hasta en 2° en el mismo sentido de la dirección para incrementar virtualmente la distancia entre ejes y así mejorar la estabilidad.
Interior muy familiar
Puertas adentro, el A7 también es muy parecido a sus hermanos antes citados, destaca el Virtual Cockpit, esa inmensa pantalla configurable de altísima resolución de 12.3 pulgadas, así como las dos pantallas ubicadas en la parte central de tablero y consola, la de arriba de 10.1 pulgadas y destinada a controlar funciones de navegación, comunicación y entretenimiento, mientras que la inferior de 8.9 pulgadas controla las funciones del climatizador automático de dos zonas.
Un detalle muy interesante, es que las pantallas centrales cuentan con feedback háptico, es decir vibran al momento de presionar alguna de las funciones, igual que un teléfono de gama alta, con lo cual siempre queda la sensación de haber oprimido un botón.
Si bien es cierto, en cuanto a materiales y armado no hay queja en absoluto o bien, encontramos asientos forrados en cuero, volante multifunción, sistema de audio firmado por Bang & Olufsen, así como compatibilidad con Apple Carplay y Android Auto, si es importante señalar que muchos elementos tanto de confort como de seguridad son opcionales, y eso es algo que decepciona un poco, luego de saber que el precio inicial supera los 1.2 millones de pesos.
Por ejemplo, hay salidas de aire atrás, pero no control independiente de temperatura y el quemacocos, head up display, así como el control activo de velocidad crucero o la cámara de 360° son opcionales.
Por cierto a manera de aclaración, si bien hay una pléyade de asistencias y sistemas de seguridad que son opcionales, el A7 incorpora de serie los elementos necesarios como las bolsas de aire frontales, laterales y de cortina, frenos ABS, ESP, cámara de reversa, anclajes ISOFIX y sensores de estacionamiento adelante y atrás.
Como se esperaba, el manejo es impecable
Para este primer contacto en México, Audi definió una ruta saliendo del sur de la Ciudad de México hacia Acapulco y de regreso, lo primero que destaca es el extraordinario aislamiento acústico tanto de ruidos provenientes del exterior, como los producidos por el viento o rodamiento (aun por arriba de los 180 km/h), sobre todo considerando que las ventanas de las puertas no tienen marco.
El Audi A7 2019 es tremendamente refinado, la suspensión filtra bien las imperfecciones del camino, la dirección es rápida y comunicativa y la capacidad de respuesta es sorprendente. Al presionar el acelerador a fondo, el A7 empuja con mucha fuerza, parece que ese V6 tuviera muchos más de los 340 hp que anuncia. Esto se debe a que la caja es rapidísima y gracias a la tracción integral, se aprovechan todas y cada una de esas 369 libras de par.
La caravana comandada por una SQ5 recorrió la autopista del sol en lo que se sintió como un pestañeo, y es que el Audi A7 2019 es capaz de rodar a ritmos de vértigo con total aplomo y transmitiendo una seguridad que en verdad cuesta creer. Para los que no lo sepan, la autopista México – Acapulco se caracteriza por tener innumerable cantidad de vados regados a lo largo de toda su extensión, y sin importar a que velocidad los tomáramos, este sedán con formas de coupé los afrontó con una facilidad sorprendente, y se acomodaba de inmediato para seguir rodando como si fuera sobre rieles.
Tras el volante, el Audi A7 no solo es un auto de lujo hecho y derecho, sino que además ofrece una dinámica de conducción impecable, transmitiendo seguridad y confianza muy por arriba de los límites de velocidad permitidos. Entonces, la única queja es que, es tan efectivo que la velocidad no se siente y ello puede propiciar que de forma inconsciente manejes mucho más rápido de lo que deberías.
Conclusión
Cualquier Audi de gama alta (repito A6, A7, A8 y Q8) es un producto altamente tecnificado y capaz (estoy dejando fuera a Q7 porque todavía no recibe estos interiores o el sistema Mild Hybrid, aunque no por ello deja de ser una camioneta premium de altos vuelos), que entrega una experiencia premium cabal, sin embargo el A7 además de eso, tiene un estilo innegablemente atractivo, ligeramente más arriesgado y mejor logrado que sus hermanos A6 o A8.