El regreso de Toyota al Campeonato Mundial de Rally FIA (WRC), era largamente esperado por los aficionados de la marca, quienes aún mantenían frescos los momentos que vivió Carlos Sainz al volante de su Corolla en la década de los 90. Por ello, el hecho que la firma nipona esté de vuelta con su Yaris WRC 2017, ilusiona a los amantes del deporte motor.
Pero para 2017, el Toyota GAZOO Racing Team no está sólo ya que para esta temporada cuenta con el apoyo de la marca de lubricantes Mobil 1, la cual también regresa al WRC tras una larga ausencia prolongada por casi dos décadas.
Este as bajo la manga ha sido crucial para que Toyota brille en su primera temporada de competición. Prueba de ello es que en lo que va del año el equipo ya consiguió un pódium en su debut en Mónaco, Monte Carlo y una victoria en el Rally de Suecia.
Good Morning! The tyres are special here in Sweden - take a look what our experts say. #YarisWRC #Toyota #RallySweden pic.twitter.com/5QteYTt0Od
— TGR_WRC (@TGR_WRC) 12 de febrero de 2017
“Mobil 1 cuenta con una trayectoria de más de 40 años en el mundo del automovilismo deportivo. Por ello nos emociona continuar esta historia colaborando con un aliado estratégico tan importante como lo es TOYOTA GAZOO Racing”, resaltó Kai Decker gerente mundial de Automovilismo Deportivo y Patrocinios de ExxonMobil.
Al igual que las firmas automotrices, las carreras son un laboratorio ideal para que marcas como ExxonMobil prueben las nuevas tecnologías de lubricantes. La experiencia obtenida, es trasladada a los productos que literalmente se pueden adquirir hasta en un supermercado.
“El WRC es el pináculo de la competencia de rally y nosotros valoramos el apoyo de Mobil 1 para asegurar que los motores del Toyota Yaris WRC se encuentren operando a su máximo nivel”, comentó Shigehisa Kitazawa, gerente general de la División de Mercadotecnia de Automovilismo Deportivo en Toyota.
Para que te des una idea de la importancia de contar con un aceite de primer nivel, debes de considerar que las condiciones tan extremas y demandantes que se presentan durante el WRC requieren de un lubricante de alto desempeño capaz de soportar temperaturas de operación extremadamente altas, que en ciertas circunstancias pueden llegar hasta los 500 grados Fahrenheit.
