La filial de BMW Group con enfoque más juvenil, es decir MINI ha pasado por diferentes ciclos, algunos muy buenos como cuando debutó el primer modelo de la era moderna en 2001 convirtiéndose en un éxito instantáneo.
Sin embargo, conforme pasaron los años el mercado probó que expandir la marca MINI a otros segmentos no es tan fácil como podría pensarse dada la buena aceptación del Cooper. Toda esa tradición con la que cuenta la firma, indudablemente es un enorme activo que le permite definir sus productos con una identidad única en el mercado, sin embargo, de cierta forma también actúa en su contra y es que conceptualmente un MINI es en la mente de los compradores un vehículo pequeño, divertido, eficiente y ágil, pero no necesariamente un Coupé, un Roadster (que fracasaron rotundamente y no existen más), o incluso un auto familiar.
El mismo nombre de la marca, en cierto sentido la limita a aspirar a contar con vehículos más grandes y cómodos. Al final del día, se llama MINI ¿o no?
El maxi MINI… el nuevo Countryman
Sin embargo y como podemos comprobar en el MINI Countryman de segunda generación, es absolutamente posible crear un auto familiar, práctico y espacioso, manteniendo todo el ADN de firma y sin dejar de aprovechar esa tendencia global de las SUVs. Para esta nueva generación, el Countryman creció en 202 mm en relación con su predecesor del cual por cierto se colocaron casi 600 mil unidades (570 mil para ser exactos), el largo total entonces ahora es de 4,299 mm, todavía 140 mm menos que la BMW X1 con la que comparte plataforma y conjunto mecánico.
Lo anterior significa que ahora sí, el MINI Countryman es un vehículo con espacio suficiente para albergar a cuatro adultos y llevar equipaje suficiente gracias a los 450 litros de capacidad de cajuela, mismos que pueden crecer hasta 1,390.
La banca posterior además se puede recorrer hasta 130 mm para incrementar el espacio de cajuela, eso sí sacrificando casi en su totalidad el espacio para las piernas en los asientos de atrás.
Adicionalmente, encontramos propuestas diferentes; como la jocosa solución denominada Picnic Bench, que no es otra cosa que un cojín y un tapete para que te puedas sentar al borde de la cajuela sin ensuciarte o enterrarte el marco del portón trasero, que por cierto es de accionamiento eléctrico con control gestual del pie.
Mecánica de última generación
Si hay un apartado del que se puede enorgullecer BMW ese es el de sus motores, y siendo MINI parte del conglomerado, evidentemente se beneficia de esta situación. Bajo el cofre del MINI Countryman 2017 encontramos un cuatro cilindros de 2.0 litros TwinPower Turbo de inyección directa que eroga 192 hp y 206 lb-pie de torque (221 lb con Overboost) desde las 1,250 vueltas que envía la potencia al eje frontal vía una transmisión automática de ocho velocidades. Se repite esa tendencia que estamos viendo en las SUVs más nuevas que llegan a nuestro mercado de dejar de ofrecer variantes AWD, que en este caso se denominan ALL4.
En el caso del Countryman, sí habrá una variante de tracción integral en el corto plazo, será una Plug-in Hybrid que estará disponible en nuestro país en el verano próximo y cuyo precio evidentemente todavía no está definido.
Divertido, como buen MINI
Tras el volante el MINI Countryman 2017 se percibe mucho más refinado que antes, filtra mejor los ruidos del exterior y la suspensión tiene un ajuste más suave, algo que se agradece, ya que resultaba inexplicable el por qué un MINI siempre tenía que ser durísimo, sin importar que se tratara del Cooper S, el Convertible o un Countryman, aún cuando este último es de orientación más familiar.
Para la segunda entrega ese problema se resolvió por completo, el nuevo MINI Countryman es más cómodo, aunque no por ello deja de ofrecer un buen manejo. La dirección es rápida y la transmisión automática de ocho velocidades (con paletas de cambio en la versión Sport) es rápida y encuentra con mucha facilidad la marcha adecuada. Esto también en gran medida a la planísima curva de par que se mantiene hasta las 4,600 rpm.
La suspensión hace un trabajo impecable para ofrecer un plantado sólido y que transmite confianza, el balance entre deportividad y comodidad es bastante bueno. Ofrece los modos de manejo Sport, Mid y Green que se pueden seleccionar mediante el aro que rodea la palanca de cambios y que alteran los parámetros de funcionamiento de dirección, respuesta de caja y acelerador para entregar un desempeño más alegre o eficiente. Y ya que hablamos de eficiencia, la marca anuncia un rendimiento combinado de 15.5 km/l.
Confort y conectividad
En materia de conveniencia, destaca el sistema de info-entretenimiento con pantalla táctil de 8.8” que cuenta con una atractiva interfaz gráfica que cambia de color según la función y que cuenta con MINI Connected.
Otros elementos como: Head Up Display, climatizador automático de dos zonas, volante multifunción, quemacocos doble, 6 bolsas de aire, ABS, ESP, sensores de estacionamiento tanto al frente como atrás y cámara de reversa, están presentes.
El MINI Countryman 2017 estará disponible en la red de distribuidores de la marca a partir del mes de Abril, ofreciendo una garantía de 3 años o 200,000 km, así como el servicio de 0 – 60,000 km incluido.
