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Probamos el KIA Picanto 2018

Viajamos a Chile para conocer de primera mano a la tercera generación del pequeño urbano de KIA.

Probamos el KIA Picanto 2018

Anticipado en el reciente Salón de Ginebra, el nuevo KIA Picanto 2018 debuta en Latinoamérica, por lo que viajamos a Chile para ponernos tras el volante del pequeño urbano surcoreano.

En relación con la generación saliente, el nuevo Picanto cuenta con una presencia más refinada y acorde a sus últimos lanzamientos. Por ejemplo, la pequeña parrilla y las fascias están mucho más proporcionados. Ahora la parrilla es más grande y su diseño se integra a la gráfica de los faros. Entrados en este tema, el conjunto óptico es más discreto y elegante, el cual según versión podrá contemplar las luces diurnas, faros de niebla o ambos. Hacia el perfil notamos que el auto gana un poco de musculatura gracias a la simplificación de las líneas de carácter, las que conforman formas más limpias y que destacan mejor la zona inferior, lo que se traduce en una presencia más deportiva. Hacia atrás, se retiene la característica gráfica en forma de C para las calaveras, pero cambia el diseño de las defensas traseras. El modelo tope-de-línea, el GT Line, utiliza un kit estético más deportivo. 

En lo estructural, el Picanto no ha crecido mucho, lo que es bueno, dada la tendencia de que cada vez los autos son más grandes.En su construcción KIA ha mejorado los anclajes de las distintas secciones, la carrocería hace un mayor uso de adhesivos y gracias a un mejor manejo de metales de alta tensión, el reparto de fuerzas privilegia la rigidez torsional, siendo estadísticamente más firme que sus rivales como por ejemplo el Volkswagen Up! o Chevrolet Spark. También se prestó atención al confort de marcha, superando a los ya mencionados rivales en insonorización.

Como ya habíamos contado previamente, el Picanto no creció ni en largo (3,595 mm) ni en ancho (1,595 mm). Sólo lo hizo en alto (1,495 mm, +15 mm) y entre ejes (2,400 mm, +15 mm). Así, tiene más espacio en los asientos posteriores y lo que es mejor, gana 55 litros en la cajuela, para un total de 255 litros. En el interior la posición de manejo se percibe más baja, con una consola más moderna y de aspecto más premium, especialmente por la posición del sistema de audio, además del diseño del climatizador y del volante, así como los posavasos y descansabrazos, que oculta un compartimiento porta objetos. Es un auto bastante practico y con espacio para todo.

En niveles de equipamiento, al menos en el Cono Sur, KIA ofrecerá las siguientes versiones: LX 1.0; EX 1.2 y GT Line. Sólo para ejemplificar, en el más básico, se cuenta con elementos como cierre centralizado, computadora de viaje, sistema de audio con MP3, USB, Bluetooth y comandos al volante, volante regulable en altura, asientos traseros abatibles 60:40, acceso keyless, vidrios eléctricos en las cuatro puertas, espejos eléctricos, doble Airbag, frenos ABS y anclaje ISOFIX. 

Del otro lado, en el más equipado GT Line no solo se distingue por su deportivo exterior, sino por contar con SmartKey, botón de encendido, volante y palanca de velocidades forrados en piel, encendido automático de luces, pedales de aluminio, iluminación completa LED, quemacocos, sistema multimedia con pantalla táctil de 7'', Bluetooth y cámara de reversa. Una lista interesante pero lejos de lo que se comercializa en otros mercados, como 6 Airbags, control de estabilidad, control de arranque en pendientes y programa de Torque Vectoring, equipo que conocimos en los modelos de prueba pero que, según la ficha técnica, no serán incorporados en los mercados regionales.

Pasando a los motores, el LX solo será ofrecido con el tricilindrico de 1.0 litros, 66 hp y 70 lb-pie de par, mientras que las demás versiones serán impulsadas por el 1.2 de cuatro cilindros, 83 hp y 89 lb-pie de torque. La transmisión principal es de 5 velocidades, mientras que la automática de 4 velocidades es opción. Mucho se ha hablado del propulsor Turbo, unidad que no está liberada para sudamérica, según los propios coreanos.

Los precios aún no han sido confirmados de manera oficial por la marca. Su principal rival es el Chevrolet Spark y el Hyundai Grand i10, modelo muy similar en motorización y tamaño. 

Durante el lanzamiento, manejamos Picanto GT Line con caja automática de 4 velocidades, 6 Airbags y control de estabilidad. Lo primero que se nota en el nuevo Kia es su desempeño positivo en carretera, mucho más fino en la dirección, con un centro de gravedad más bajo, exhibiendo mucho menos rolling y con una posición de manejo más deportiva. Es un auto que inspira mucha seguridad al manejar, incluso más que modelos más grandes, además de que tiene más tacto y es más silencioso. La caja automática está configurada para un rendimiento económico y este carácter se percibe principalmente en subidas. Promediamos cerca de 18 km/l en carretera.

En definitiva, el nuevo KIA Picanto 2018 es un mejor auto que la generación anterior y se perfila como un serio rival a batir en el segmento de los urbanos.

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