Manejamos el Cadillac ATS-V 2016

Antecedentes

Antes de comenzar hablar de este compacto deportivo de lujo, hay que aclarar que la familia V-Series en Cadillac son modelos con prestaciones deportivas de alto desempeño con el grado de lujo que caracterizan a la marca. Este Cadillac ATS-V viene a integrarse a la gama y se comercializa en dos versiones coupé como sedán, éste último es el que tuvimos en nuestras manos.

Diseño

Estéticamente es igual a un ATS normal; sin embargo tiene detalles que lo hacen singular como las nuevas fascias con tomas de aire más grandes, parrilla con forma de panal, cofre abultado con salidas de aire, rines exclusivos de 19 pulgadas, calipers –que se pueden pedirse en colores-, alerón en la tapa de la cajuela, faldones y un difusor trasero flanqueado por dos salidas de escape. Todo en conjunto le da un aspecto deportivo como soberbio.

Datos técnicos y mecánica

Uno de los principales cambios a los que fue sometido es precisamente el motor, pues se sustituye el motor de cuatro cilindros turbo, por un V6 de 3.6L de inyección directa biturbo con 464 equinos y 445 Lb-pie, que se transmiten al eje trasero a través de una transmisión automática de ocho velocidades.

Con respecto a la suspensión es McPherson adelante y Multi Link atrás, ambas independientes con barra estabilizadora, ésta fue modificada para contar con Magnetic Ride de tercera generación, esto significa que es 40% más rápida para amortiguar y lee constantemente las condiciones del camino para reaccionar en milésimas de segundo.

En el rubro de seguridad trae bolsas de aire para conductor y acompañante, de cabeza delanteros y traseros (cortina), de rodilla conductor y copiloto, laterales delanteros. Consta de frenos ABS, EBD, control de estabilidad como tracción, advertencia de cambio de carril, control electrónico de la suspensión entre otros.

Interior

Alberga cómodamente a cuatro pasajeros; sin embargo sentimos que el espacio para las piernas es algo limitado, esto es causado por el ostentoso tamaño de los asientos delanteros.

Referente a equipamiento trae todo lo que podemos esperar en un vehículo premium, pero deseamos destacar las luces bixenón, climatizador bizona, sistema de infoentretenimiento con navegador, pantalla táctil de 8”, reproductor Mp3, CD, radio y conectividad para Android Auto como Apple Car Play, entrada USB o Bluetooth y sensores de estacionamiento delanteros como traseros.

Hablando del diseño en el habitáculo,l al igual que en el exterior, encontramos detalles deportivos que lo diferencian del ATS tradicional, éstos son asientos de cubo Recaro, pedales, acabados de alcántara en diversas partes y emblemas con la letra V.

Manejo

Lo primero que deseamos destacar es que posee cuatro modos de manejo: Turismo, Deportivo, Nieve/Hielo y Pista. En este último contamos con la función de Launch Control, ideal para una aceleración de vértigo. En cualquiera de las diferentes opciones se nota una gran diferencia, la dirección se endurece al igual que la amortiguación y se afina la respuesta del pedal derecho. 

Con un peso de 1678 Kg, al volante este compacto deportivo de lujo acompañado de un poderoso propulsor de 464 caballos, nos entrega una aceleración de 0 a 100 Km/h en sólo 4 segundos y llega a una velocidad máxima de 300 Km/h.

En relación a los frenos, éstos son de disco en las cuatro ruedas, tienen un diámetro de 36.8 cm adelante y atrás de 33.78 cm. Funcionan a la perfección respondiendo con premura y son realmente precisos, dan mucha confianza al sólo tocarlos ligeramente. A nosotros nos dió una capacidad de frenado de 110 Km/h a 0 de 46.94 metros.

Respecto al consumo de combustible no nos esperábamos un gran número por supuesto por el enorme V6 de 3.6L. En ciudad nos otorgó 5.95 Km/l, mientras que en carretera nos dio 9.35 Km/l.

Por otra parte la dirección es eléctrica progresiva, es buena, sin embargo creemos que no retroalimenta bien lo que sucede en las ruedas delanteras. Tomando curvas como en giros bruscos responde bien y se siente bastante estable.

Conclusión

Este Cadillac ATS-V nos gustó y mucho, creemos que es el balance perfecto entre lujo como desempeño motriz. Un digno adversario estadounidense contra los dos alemanes el BMW M4 como el Mercedes-AMG C63 S. Lo probamos en ciudad, carretera y pista, el comportamiento del mismo en cualquiera de las tres circunstancias fue de lo mejor, es bastante divertido de manejar y responde con premura al pisar el acelerador. Es un auto muy veloz, super estable en curvas con un buen agarre –se pega como lapa al asfalto y en ningún momento se siente nervioso en la parte trasera.