El primer contendiente es el renovado Toyota Camry, que aunque es prácticamente el mismo auto que el de la sexta generación (la actual es la séptima), tiene tantos cambios que se puede hablar de un “facelift” profundo. En la otra esquina está el recién llegado Volkswagen Passat, que en lugar de venir de Europa como el modelo que reemplaza, proviene de la nueva planta del conglomerado VAG en Estados Unidos, ubicada en Chattanooga, Tennessee, ya que fue creado para atacar de manera agresiva al mercado norteamericano. Pero ¿Cuál de estos dos es mejor?
Comenzamos con el Toyota Camry 2012, que en esta ocasión, probamos la versión más equipada, la XLE V6.
Estéticamente, esta séptima generación del Camry tiene un toque más deportivo y moderno, algo que antes no se veía en este auto. La propuesta de diseño puede no ser del gusto de todos pero sí es mucho más novedosa que la del Nuevo Passat.
Por dentro es quizás donde más cambios encontramos respecto a la generación anterior pues ya que utiliza la misma plataforma, mide exactamente lo mismo de largo (4.805 m) y en distancia entre ejes (2.740 m), pero necesitaban ganar más espacio así que acomodaron de forma diferente los asientos, mandaron para adelante los rieles igual que los pedales e hicieron más delgados los respaldos de los mismos para darle más espacio a las plazas traseras, algo bastante astuto hay que reconocer.
El diseño del tablero también resulta algo muy sorprendente pues de los dos que estamos comparando, éste es el más atractivo y con más propuesta. Los plásticos del interior se sienten muy bien, con las zonas que están más expuestas a los ocupantes en un material más suave al tacto. Además, la construcción es muy buena –no como en el alemán, pero sí se nota un buen trabajo en este aspecto.
En materia de equipamiento, encontramos amenidades que ya son obligadas en este segmento –sobre todo cuando se trata de la versión tope- como el sistema de navegación, computadora de viaje, acceso y encendido sin llave, controles en el volante de audio y de velocidad crucero, conectividad Bluetooth para el teléfono y control de clima de dos zonas.
Una gran virtud de estos autos, es la cajuela que en el caso del Toyota Camry 2012, tiene una capacidad de 437L, suficientes para acomodar el equipaje de las cinco personas que pueden viajar en el habitáculo.
El motor, para este nuevo modelo 2012, se mantiene igual. Un V6 de 3.5L naturalmente aspirado con doble árbol de levas a la cabeza, 24 válvulas y sistema variable de apertura de las mismas, que entrega una nada despreciable potencia de 268 hp a 6,000 rpm y 248 lb-pie de torque a 4,700 rpm. Está acoplado a una transmisión automática de seis relaciones con modo manual que manda la tracción a las ruedas delanteras.
La palabra más sencilla para describir el manejo de este Camry, es comodidad. Tanto la suspensión, dirección (eléctricamente asistida) y la transmisión ofrecen una gran suavidad de manejo. Aunque el motor cuenta con una buena potencia y respuesta tras pisar el acelerador, el Camry se nota orientado a un manejo sin prisa, cómodo para viajes largos y ahorrar combustible.
Finalmente llegamos al controversial Volkswagen Nuevo Passat. Un auto que es completamente diferente al modelo anterior y significativamente más barato también, algo que lo pone en la jugada contra autos como el Toyota Camry 2012 con el cual lo estamos comparando y que con el que antes existía una brecha de casi $100,000 pesos en el precio ya que era importado de Europa.
Este Passat 2012 fue diseñado para satisfacer las necesidades del mercado norteamericano (México, Estados Unidos y Canadá), algo que podemos apreciar desde su sobrio diseño exterior –el cual definitivamente se nota influenciado por el Nuevo Jetta- y sus impresionantes dimensiones de 4.868m de largo, 2.803m de distancia entre ejes y 1.835m de ancho.
Volkswagen nunca ha destacado por ser innovador en diseño interior, pero el tablero de este nuevo Passat, con tantas superficies cubiertas de imitación madera ¡parece como uno de los años 90! Y si a esto le sumamos el reloj análogo al centro del tablero… podemos decir que el Camry tiene una propuesta más fresca y juvenil que éste.
Los materiales plásticos y ensamble sí se notan superiores a los del Camry y no por que los de éste último sean malos, sino por que Volkswagen ha sabido llevar muy bien sus productos para que cada cosa que se mueve no se sienta frágil o produzca sonidos desagradables. Este Passat está más cerca –en cuanto a calidad- de los productos alemanes de la marca que cualquier otro fabricado en América.
El espacio interior del Passat 2012 es impresionante. La parte trasera tiene tanta distancia entre los asientos que cualquier persona -por más alta que sea, podrá viajar con las piernas completamente estiradas y en total comodidad.
Las grandes dimensiones de éste, también se notan en el área de carga, pues mientras que el Camry se tiene que conformar con “sólo” 437L, la cajuela del Passat 2012 tiene una capacidad de ¡529L!
Al igual que el Camry, el Passat está muy bien equipado, sólo que en este caso sí se nota un desarrollo más nuevo, fresco y fácil de usar. La pantalla sensible al tacto desde la cual se controla el sistema de entretenimiento es más fácil de usar que los tantos botones y submenús del que encontramos en el Camry, además de que existen accesos directos a la navegación que no encontramos en el japonés. También está la ventaja de poder transmitir audio mediante Bluetooth, para que no tengas que sacar tu teléfono o dispositivo de audio de la bolsa para escucharlo desde las bocinas del sistema de sonido.
En el caso del alemán, puedes adquirir como extra el sistema de audio Premium Fender con subwoofer como el que monta el auto que probamos y para el Camry, viene de serie en esta versión con uno JBL de 10 bocinas.
El desarrollo más actual del Passat también se nota en la parte mecánica pues Volkswagen le ha dotado de un motor V6 ligeramente más grande y más potente que el del Toyota. Éste es de 3.6L con inyección directa FSI con 24 válvulas que produce una potencia de 280 Hp a 6,200rpm y un torque de 350 Lb-pie entre las 2,500 y 5,000 rpm. Está acoplado a la transmisión DSG de seis relaciones de doble embrague y modo manual (cambios mediante la palanca o paletas detrás del volante) que manda la tracción al eje delantero.
Esta nueva tecnología sí se nota a la hora de manejar uno y otro, pues mientras el Camry es más cómodo en el tránsito citadino gracias a la caja automática, la respuesta de la DSG de Volkswagen es mucho más agresiva y en algunos arranques se siente una ligera patada. Cuando se trata de velocidad y manejo en carretera, sale a relucir la puesta a punto de la transmisión de doble embrague que en modo Sport hace los cambios hasta la parte más alta del tacómetro y cambia hacia abajo para tener toda la potencia al salir de la curva.
La dirección también es más comunicativa en el Passat y la suspensión no sacrifica confort por menos movimiento de la carrocería al girar rápido, haciéndolo más ágil y divertido de manejar que el Camry.
Conclusión
Aunque la extensiva renovación del Toyota Camry 2012 definitivamente lo hace un producto más completo y de mejor calidad que su generación anterior, el espacio interior del Passat, la tecnología impuesta en el tren motriz y la calidad de ensamble hacen de éste el ganador de nuestra comparativa.
Después está el precio que estratégicamente está posicionado a escasos $200 pesos –sí, sólo 200 pesos uno de otro, posicionándose abajo el Toyota Camry XLE V6 con $401,800 pesos y el Volkswagen Nuevo Passat V6 en $402,000.
Si bien la diferencia de precios es rídicula, el avance tecnológico del Passat vale más que sólo esos $200.00.