En el marco de las pasadas 24 Horas de Le Mans, Ferrari aprovechó para presentar una nueva variante extremadamente exclusiva de uno de sus autos, el Ferrari 296 GTB Piloti. Un auto que se distingue por el livery que lleva por fuera, pero también por un requisito que va más allá de tener suficiente dinero de sobra para comprar un Ferrari.
Esta edición especial es parte del programa de personalización a la medida de Ferrari y a grandes rasgos toma un 296 GTB y le da el mismo livery que llevan los autos oficiales de la marca que compiten en el WEC. Es así que solo se puede conseguir ya sea con carrocería en los colores Rosso Scuderia, Blu Tour de France, Nero Daytona y Argento Nürburgring. Sobre ese color se colocan elementos en amarrillo (Giallo Modena) cómo los que llevan los Ferrari 499P. Además se pintan a mano las siglas del WEC y se le da un número que el cliente elegirá para que se coloque sobre las puertas y parte delantera.
Por dentro también hay un tapizado en Alcantara de color negro con acentos contrastados, asientos extra ligeros de comptencia, una placa de fibra de carbono que lo distingue cómo edición especial, estriberas personalziables, la bandera italiana en el volante, entre otros.
Mecánicamente la marca no hace modificaciones, por lo que sigue usando su V6 biturbo de 3.0 litros apoyado de un sistema híbrido con el que llega a 880 hp, un 0-100 km/h en 2.8 segundos y una velocidad punta de 330 km/h. Mantiene la misma batería de 7.45 kWh que le permite un rango en modo 100% eléctrico de 25 km.
Ahora, el requisito para poder hacerse de este auto es estar involucrado en las actividades deportivas oficiales de Ferrari. En pocas palabras ser un piloto profesional ya sea en activo o retirado, o bien pertenecer al programa exclusivo de Corsa Clienti, en el que los clientes más distinguidos pueden comprar autos de carreras antiguos de la marca para disfrutarlos en diversos circuitos alrededor del mundo.
