Estamos viviendo tiempos donde la agenda actual está marcada por el conflicto bélico en Ucrania, donde más allá de los argumentos que motivaron la invasión rusa, lo que podemos ver es una férrea resistencia local, que sin dudas será recordada más adelante. Todo esto me hizo recordar la foto de un monumento muy particular que ví en internet y del que decidí investigar su historia, ya que siento que representa muy bien la resistencia de un pueblo ante una invasión.
Lo que podés ver en la imagen es un pequeño FIAT 600 pisando un enorme tanque T-55 de fabricación soviética, y sólo esta imagen tiene una historia interesante que contar.
Estamos en el 25 de junio de 1991, cuando Croacia declaró su independencia de la por entonces Yugoslavia. El extinto país (que hoy se divide en Bosnia y Herzegovina, Croacia, Eslovenia, Macedonia del Norte, Montenegro, Serbia y Kosovo) no se quedó de brazos cruzados y envió al Ejército Popular Yugoslavo para aplacar la gesta independentista.
Apenas dos días después, el 27 de junio, en la ciudad de Osijek los tanques T-55 del ejército Yugoslavo recorrían impetuosamente la calle Vukovarska sin encontrarse ninguna resistencia, ya que por ese entonces Croacia no contaba con ningún tipo de fuerza armada. Bueno, casi ninguna salvo el auto de Branko Breškić, que estacionó su Zastava 750 (la versión oriental del FIAT 600, llamado localmente como “Fićo”) en el camino de los tanques, en un intento por detener el convoy.
El resultado de su barricada improvisada puedes verlo en el video al final de la nota, el T-55 jamás aminoró su marcha y despedazó al pequeño vehículo aplastándolo bajo su oruga y un tranvía. Parece que a raíz de este suceso Breškić se unió a la incipiente resistencia armada croata, y terminó sus días como combatiente.
A 20 años de ese acontecimiento, el 27 de junio de 2011, se inauguró ese curioso monumento en la ciudad de Osijek, resignificando la historia y poniendo al “Fićo” por encima del T-55, homenajeando una resistencia croata que luego de un tiempo logró vencer a las fuerzas invasoras, a pesar de estar en inferioridad de condiciones. Sin dudas este monumento logra el objetivo de que al ser tan particular, la gente se pregunte por su significado, y al aprenderlo, valore el suceso que le dio sentido.
La historia del Fico rojo