Si bien todos los autos antiguos suben de precio conforme pasan los días, existen modelos que aumentan más su valor por la fama que tienen en el mundo.
Uno de los modelos que tiene una mayor sobrevaloración es el Mustang, más aún en versiones extradeportivas y limitadas. Un claro ejemplo de ello es el Shelby GT350R Prototype (número de chasis 5R002), que, en 2020, se colocó como el Mustang más caro al venderse por 3.1 millones de dólares.
Apodado como "Flying Mustang", el primer Shelby GT350 "R-Model", no solo es el Shelby Mustang más importante del mundo, sino también es el muscle car más caro que existe.
Su creación se debe a la respuesta de Shelby al deseo de Ford de crear una imagen de alto rendimiento del Mustang. Al estilo típico de Carroll Shelby, fue que se produjo una máquina diseñada no solo para calificar para la competencia SCCA Production Sports Car, sino también para dominarla por completo.
Simultáneamente este auto sirvió como la mula de ingeniería de fábrica de Shelby American, un banco de pruebas rodante para ideas y componentes, incluidos los que constituirían tanto el segundo automóvil del equipo (5R001) como los 34 modelos R de clientes.
Al mismo tiempo, el 5R002 también sirvió como auto demo para convencer a los posibles compradores del modelo R del tremendo potencial del automóvil.
Físicamente, el 5R002 es completamente magnífico; el único automóvil construido con su configuración específica, presenta numerosas partes y atributos de diseño que no se encuentran en ninguno de los modelos R que lo siguieron.
Después de ser el primer Shelby Mustang en ganar una carrera, de hecho, se destacó en docenas de carreras en 1965, el automóvil fue vendido el 31 de marzo de 1966 por Shelby American por la cantidad de 4,000 dólares como un "automóvil de prueba” a Bill Clawson de Dearborn, Michigan, un ingeniero de la División de Desempeño de Ford en Dearborn, directamente al jefe de división Ray Geddes
En 1970, el Mustang volvió a cambiar de dueño y entró en el garaje del piloto Luis Blanq-Cacaux , quien solo lo usó en algunas carreras, y luego lo abandonó durante unas dos décadas.
En 1989 se exhibió en el Museo Shelby en Boulder, Colorado, en el estado en el que había sido "abandonado".
Más tarde John Brown's Thoroughbred Restorations lo restauró por completo, reinstalando también el motor 289 original de más de 300 hp.
Así, tras volver a su nuevo esplendor, en 2020, se vendió en una subasta a un precio de 3.1 millones de dólares y en 2022 fue puesto a la venta de nuevo, solo que en esta ocasión se pagaron 4.1 millones de dólares.