El área de dictámenes periciales de Cesvi, comparte las causas que provocan esta clase accidentes, que se pueden evitar, y recomendaciones de cómo actuar frente a estos hechos.
Lo primero es considerar que para que se genere un incendio se requiere un foco de calor; en el caso de los automotores, son varias las fuentes potenciales al interior del mismo, como
- Llama directa: se puede originar por manipular al interior o cerca del vehículo un fósforo, un encendedor o algún material inflamable.
- Fricción: se genera por dos superficies en rozamiento, sobre todo, en elementos móviles como ruedas, sistema de frenado, poleas y correas.
- Chispas: se producen por rozamiento entre dos superficies metálicas o al rozar el acero con el pavimento.
- Superficies calientes: sistemas o piezas que se calientan a temperaturas extremas y al contacto con algún combustible puede generar un incendio. Ejemplo: sistema de escape (colector, silenciador y catalizador) y turbocompresor.
- Fuente eléctrica: cableado del sistema eléctrico, arcos eléctricos (por cables rotos, cortados o deteriorados, o como consecuencia de una colisión o accidente), batería (bien sea por el hidrógeno que se desprende de la reacción química o por una chispa generada en su exterior o interior), carga eléctrica o corto circuito.
- Otras fuentes de calor: una colilla sobre papeles, ropa o cualquier combustible, proceso de reparación del vehículo, procesos de soldadura, manipulación inadecuada, derrame de líquidos inflamables, siniestro, choque o colisión.
El conductor debe estar atento en todo momento para evitar que cualquier foco potencial de un incendio comprometa la integridad del vehículo y de sus ocupantes; por ello, resulta vital prevenir, estar atento a los manuales del oche y seguir las recomendaciones de los expertos. Estos son algunos errores humanos que pueden desencadenar incendios en un automotor:
- Fumar dentro o cerca del vehículo.
- Manipular o intervenir inadecuadamente los sistemas eléctricos o mecánicos.
- Usar el vehículo para fines diferentes a los permitidos, tales como transporte de líquidos inflamables o gases combustibles.
- No cumplir con los mantenimientos sugeridos por el fabricante.
- Portar objetos que al contacto con el sol actúen como efecto lupa, (depósitos o botellas de vidrio).
- Manipular el vehículo posterior a una colisión media o fuerte.
- No prestar atención a los testigos o alertas generadas por el vehículo.
- Usar inadecuadamente los accesorios del vehículo, como el encendedor.
¿Cómo actuar si se incendia el vehículo?
Como en todo tipo de conflagración, es imperativo tratar de guardar distancia y recordar que este tipo de incendios NO se deben apagar con agua. Tampoco es sensato intentar intervenir o manipular los sistemas mecánicos o eléctricos cuando haya presencia de fuego y no se debe intentar rescatar artículos materiales, una vez iniciado el incendio.
Tan pronto se advierte el inicio del fuego, lo primero es evacuar el vehículo y tomar distancia del mismo; en lo posible, dar aviso a los organismos de asistencia; acordonar el área del suceso, usando el equipo de señalización para evitar que empeore la situación; tratar de controlar o sofocar el incendio con el uso de extintores adecuados y prestar ayuda a las víctimas que lo requieran.