En el mercado europeo rigen estrictas normas que certifican la calidad de los vehículos comerciales que se mueven por la ciudad y sus alrededores, prestando especial atención en los denominados Vehículos Comerciales Livianos, que son precisamente los que mayor impacto tienen sobre el tránsito y la contaminación de los grandes centros urbanos. Pero su aporte es fundamental, por lo que las empresas que recurren a ellos deben estar muy bien informadas al momento de renovar o aumentar sus flotas.
Y esta necesidad de información es la que satisfacen los medios especializados, como la revista británica “What Van”, responsable de analizar en terreno a los actores del mercado y emitir juicios objetivos acerca de ellos, para que sus lectores puedan tomar la mejor decisión de compra; en Inglaterra las normas que vigilan el transporte son aún más rigurosas.
Es por lo anterior que cobra un valor tan alto el atribuirse alguno de los premios que la revista “What Van” entrega cada año, porque sobre esa sólida base las diferentes marcas pueden ofrecer sus productos a los compradores, los que a su vez confían en la opinión de una voz externa. Y si ya es valioso adjudicarse uno de estos reconocimientos, más importante aún es hacerlo por segundo año consecutivo, como el caso del Citroën Berlingo.
Sus rivales en la categoría “Light Van” fueron: Peugeot Partner, Vauxhall Combo Cargo y Toyota Proace City, oponentes que sucumbieron ante las muchas cualidades del ejemplar proveniente de la casa del doble chevrón; no deja de ser curioso que derrotara a sus hermanos corporativos, considerando que comparten plataforma y componentes mecánicos.
