Si hay una marca independiente que ha llamado la atención de los entusiastas en el último par de años, es la casa francesa Reservoir. Su ascenso dentro del ambiente de la relojería de nivel «entry luxury» —de hasta cinco mil dólares— ha sido meteórico.
La firma, fundada apenas en 2017, justo en un momento casi crítico de la relojería, especialmente para empresas independientes, no dudó un momento con su atrevida propuesta relojera, que, si bien no era inédita, no había sido aprovechada con convicción ni con gracia y calidad.
Los relojes de Reservoir se inspiran en las funcionalidades y el atractivo estético de los instrumentos de medición de los autos clásicos. Aquellos instrumentos, junto con la pasión por la velocidad y el tiempo, son el punto de partida de esta estupenda propuesta.
¿Qué rasgos definen los relojes Reservoir?
La manecilla única de la carátula hace un gran salto retrógrado cada 60 minutos, en tanto la hora digital se asoma por encima de la genial indicación de la reserva de marcha.
En la variante Longbridge Nightfall que te presentamos —con su bella carátula azul—, el diseño luce sorprendentemente recatado y elegante, pero siempre listo para llamar la atención en todo momento.
A pesar de que en el papel el concepto del diseño podría asumirse como rebuscado, el reloj es notablemente legible y, más aún, fascinante de ver, especialmente durante los cambios de hora.
El detalle de la indicación de la reserva de marcha (un arco que emula una marcación de nivel de combustible analógico a las 6), que en todo Reservoir agrega un toque de suma diferenciación como no se había visto en relojería de este nivel en mucho tiempo, es una rúbrica perfecta que redondea de manera idónea el concepto.
No podemos pasar por alto las los esbeltos numerales en la carátula del Longbridge que, sin pretender ser un toque vintage, nos recuerdan los relojes e indicadores en los tableros automotores de hace algunas décadas. Su inclusión en estas referencias fue brillante.
Reservoir continúa expandiendo su colección (en la segunda mitad de este año, la firma presentará el reloj Hydrosphere con características de buceador— de diversas formas.
Longbridge, su emblemática y más representativa serie, ya incluye referencias con caja de oro, como el Club Rose Gold, en 18 quilates. No obstante, la mezcla de valor y originalidad relojeros —a los que se aúna la excepcional calidad y presentación— la han convertido en una marca casi de culto y muy gustada por conocedores y buscadores de valor.