¿Te pasó alguna vez que querías agradar y empezaste con el pie izquierdo? Algo parecido debe estar sintiendo Elon Musk, ya que su compañía Tesla Motors está con todas sus esperanzas depositadas en China, país donde quiere ser referente en materia de vehículos eléctricos. Lo que no tenía contemplado el magnate es que este video se iba a hacer viral.
En la grabación de la cámara de seguridad de un estacionamiento en Shanghai podemos ver como un Tesla Model S de primera generación comienza a echar humo por debajo (donde está situado el paquete de baterías) y genera una gran explosión que desata un fuego incontrolable.
Good or bad, negative or positive I will post anything about Tesla or EVs in China. This happened today in Shanghai, China 🇨🇳 1st generation Tesla Model S caught Fire 🔥 underground car park.#Tesla #TeslaChina #ModelS #Fire #China #Shanghai #特斯拉 #中国 $TSLA pic.twitter.com/HOwMcvulV1
— Jay in Shanghai (@ShanghaiJayin) 21 de abril de 2019
Este video circuló por la red social china Weibo, hasta que un usuario de ese país también la subió a Twitter explicando lo sucedido. En otro de los videos se puede ver las consecuencias de este incendio, donde poco quedó del vehículo californiano y los autos que estaban cerca de él.
Aftermath hopefully we will hear from Tesla what truly happened. pic.twitter.com/DuFi0pW9dk
— Jay in Shanghai (@ShanghaiJayin) 21 de abril de 2019
Según reportó la misma filial china de Tesla, la empresa envió un equipo de trabajo a investigar lo sucedido y junto a las autoridades locales se percataron que ninguna persona había resultado herida (el vehículo estaba sin ocupantes y por fortuna nadie pasaba cerca) pero no determinaron aún las causas de lo sucedido.
No es la primera vez que un Tesla se incendia, ya hubo casos donde después de un choque las baterías colapsan y explotan. Esta vez será pertinente que la empresa encuentre una explicación a lo sucedido, sino será un durísimo golpe para el futuro de Tesla y los autos eléctricos. No hace falta recordar que por más prestigiosa que sea una empresa, si sus productos son peligrosos (véase el caso de Samsung con su explosivo Galaxy Note 7) la condena es inevitable.