CUPRA tiene puestas sus esperanzas de la movilidad del futuro con el e-Racer, y este hatchback, no desentonó en la pista del circuito de Zagreb, Croacia.
Sus componentes fueron probados por aparte –sístemas electrónicos, propulsión y refrigeración, entre otros-, y era el momento de la verdad y saber si estos, junto a la batería eléctrica, pasarían la prueba, para así estar un paso más cerca de la producción.
Las condiciones de la pista eran óptimas, y el CUPRA e-Racer aprovechó esto y entre más giros daba, los ingenieros de la marca catalana se convencían de que podía cumplir los retos de competencia.
“Con el CUPRA e-Racer queremos llevar la competencia al siguiente nivel. Estamos demostrando que podemos reinventar el Motorsport y alcanzar el éxito. La competencia a motor es uno de los pilares de CUPRA y estamos orgullosos del equipo que está haciendo viable la posibilidad de tener un hatchback eléctrico de carreras”, asevero Matthias Rabe, vicepresidente de Investigación y Desarrollo de SEAT.
Cabe señalar que el CUPRA e-Racer tiene una batería con 6.072 pilas cilíndricas –se recargan en 40 minutos-, lo que es equivalente a 9000 pilas de teléfonos celulares.
Después de este duro test, no queda duda que el CUPRA e-Racer, puede participar sin problemas en el E-TCR o Campeonato de Autos de Turismo Eléctricos en 2019.