La nueva generación de la Clase A de Mercedes-Benz se anticipó a su aparición en público durante el próximo Salón de Ginebra de marzo próximo, y para los distraídos parece no haber cambiado tanto, mas allá de sus faros. Pero creéme que si lo miras en detalle, vas a notar muchísimas diferencias, y si lo ves por dentro, directamente parece otro modelo.
Mercedes-Benz continúa expandiendo su nuevo lenguaje de diseño “Sensual Purity” (Pureza Sensual”) que ya vimos en la nueva generación del CLS y que se adelantó en parte con el Concept A Sedán presentado en el último Salón de Shanghai.
Tal como su nombre lo indica, enaltece las líneas de la carrocería con superficies mucho más limpias, en este caso haciendo que el cofre sea más estilizado, con parrilla y luces LED de nuevo diseño.
Desde atrás tenemos algunas curvas que acercan a este modelo a la estética de la familia de las SUV de la estrella, con calaveras más delgadas y curvas, pero sin cambios significativos con respecto a la generación anterior.
Con respecto a la generación que reemplaza, tenemos salpicaderas más grandes que permiten la inclusión de llantas de 16” a 19”, según la versión, y también una mayor distancia entre ejes, que ahora se extiende 30 mm. El tamaño del Mercedes-Benz Clase A también se incrementa a lo ancho y en su capacidad, logrando una cajuela con 370 litros, 29 más que antes.
Por dentro
Pero más allá de lo que se vé por fuera, los cambios en el interior son los más notorios, mas que nada por la inclusión del nuevo sistema multimedia de la marca de la estrella, denominado MBUX, el cual se activa mediante el comando de voz “Hey Mercedes” y aprende a reconocer nuestros mandatos progresivamente mediante Inteligencia Artificial.
El interior fue lo primero que quiso anticipar Mercedes y tiene una buena razón: no hay instrumental analógico, ni plásticos duros, solamente aire premium, como si se tratara de un auténtico Clase E.
Por delante del conductor tenemos en la versión tope de gama unas pantallas duales de 10.25”, que se llevan literalmente toda la atención. Además de esto, las luces ambientales pueden seleccionarse entre 64 colores distintos. Siguiendo con el rubro tecnológico, vale destacar que el nuevo Clase A integra funciones de conducción semi-autónomas, con el sistema “Pre-Safe Plus” que detecta una inminente colisión trasera y aplica los frenos para minimizar la sacudida hacia adelante, como así también un control de velocidad crucero adaptativo, frenado de emergencia y asistente de cambio de carril.
Así funciona
En el apartado mecánico encontramos tres variantes de motor, dos a gasolina (A200 y A250) y una diésel (A180d). Esta última versión cuenta con un un motor 1.5 litros que entrega 115 Hp a las ruedas delanteras, mediante una caja DSG de 7 marchas.
Por el lado de las motorizaciones a gasolina, la versión A200 emplea un pequeño bloque de 1.4 litros turbo de 160 Hp y 184 lb-pie, que puede estar acoplado a una caja manual de 6 como así también a la automática de doble embrague con 7 velocidades. Pasando a la versión A250, esta posee un 2.0 litros de 221 Hp y 258 lb-pie, con la caja DSG de 7 como única opción por el momento. Esta versión, la mas deportiva hasta la llegada de la variante AMG con más de 400 Hp, puede hacer el 0 a 100 Km/h en 6.2 segundos.
La version A250 y las versiones que pueden elegirse con tracción integral 4Matic poseen suspensión trasera multibrazo, y con un sistema de tracción que ha sido actualizado añadiéndole al diferencial trasero un embrague multidisco de accionamiento electromecánico, cuando antes era electrohidráulico.
Si quieren saber algo más de este nuevo compacto premium, que se coloca como el nuevo punto referencial en el segmento, habrá que esperar hasta el Salón de Ginebra en Marzo. Seguramente lo tendremos en México a mediados de este año.
Mercedes-Benz Clase A 2019