Volvo Cars ha elegido el Consumer Electronics Show (CES) 2016 para dar a conocer que está desarrollando una serie de tecnologías para elevar el confort en los vehículos autónomos.
De la mano de Ericsson, la marca sueca pretende que los vehículos estén conectados a la red y a la nube para obtener el menor tiempo en los recorridos. Por medio de esta conexión se busca que el sistema aprenda las rutas y horarios de viajes más comunes.
Así, los futuros automóviles de Volvo serán capaces de proporcionar a los conductores una lista de rutas y la cantidad de tiempo autónomo que está disponible durante su viaje.
Una vez más queda demostrado que el futuro de la industria automotriz apunta a la conducción autónoma. Gran parte de los fabricantes de vehículos espera que está tecnología esté a la disposición de los consumidores en una década.