Si bien el Camaro no genera el mismo nivel de pasión que el Mustang, nadie puede negar que el muscle car de Chevrolet es todo un auto de culto. Desde su introducción en 1967, este deportivo americano ha visto pasar cinco generaciones, así como una ausencia en el mercado de ocho años.
A lo largo de este casi medio siglo de vida, Chevrolet Camaro ha evolucionado en todos los aspectos, pero siempre manteniendo ese espíritu de deportividad que todo amante de un "american car" busca. Para darnos una idea del progreso que ha tenido este deportivo basta ver las fichas técnicas de cada una de las generaciones y encontrar que la potencia que ha aumentado de los 140 a los 580 hp (en los 80 existió una versión con 88 hp).
A pesar de que los muscle cars (Camaro, Mustang, Challenger, y Charger) han tenido que luchar contra temas de consumo y emisiones, su arraigo continúa en nuestros días. Para ello han tenido que adaptarse a las tecnologías modernas para ofrecer una gran eficiencia además de su alto desempeño, algo inimaginable en la décadas de 1960 y 1970.
Aprovechando que en unas semanas Chevrolet dará a conocer la sexta generación del Camaro daremos un recorrido en sus 48 años de existencia.
