General Motors anunció que Dan Akerson, quien llevo a GM a registrar ganancias y a mejorar dramáticamente la calidad de los vehículos mientras cerraba el capítulo de la propiedad estatal de la empresa, dejará su puesto como Director General y CEO el 15 de enero de 2014.
Mary Barra, de 51 años, Vicepresidenta Ejecutiva de Desarrollo de Productos Globales, Compras y Cadena de Suministros, fue elegida por el Concejo Directivo para ser la próxima CEO de la compañía. Barra también se incorporará a la Junta de GM.
Akerson, de 65, sacó adelante su plan de sucesión varios meses después de que su esposa fue diagnosticada con estado avanzado de cáncer. La junta también llamó a Theodore (Tim) Solso para suceder a Akerson como presidente. Solso, de 66, es el ex presidente y Director General de Cummins, Inc., y ha sido miembro del Concejo de GM desde junio de 2012.
Me iré con gran satisfacción con lo que hemos logrado, y un gran optimismo sobre lo que está por delante y con el gran orgullo de que estamos restaurando a General Motors como el abanderado de los Estados Unidos en la industria automotriz mundial”, dijo Akerson.
Con 33 años de experiencia en GM, Barra ha surgido a través de una serie de cargos de alto nivel en manufactura e ingeniería. Ella es una líder clave en la actual transformación de la compañía, revitalizando el proceso de desarrollo de productos de GM que resultó en el lanzamiento de nuevos productos aclamados por la crítica, mientras entregó un récord de resultados en calidad del producto y una mayor satisfacción del cliente.
“Me siento honrada de dirigir al mejor equipo de la industria y de mantener nuestro impulso a toda velocidad”, aseveró Barra.
Akerson fue nombrado Presidente y Director General en septiembre 1, de 2010. Se unió a GM en 2009 como miembro de la Junta Directiva. Desde la salida a bolsa de la compañía en noviembre de 2010, GM ha registrado quince trimestres consecutivos de rentabilidad, ha obtenido las mejores puntuaciones de calidad de vehículos iniciales globales de cualquier fabricante de automóviles, y ha reinvertido casi 9 billones de dólares y creado o mantenido más de 25.000 puestos de trabajo en las plantas estadounidenses.