La línea Continental del fabricante inglés es la de mayor volumen en sus ventas y está formado por un coupé (Continental GT), un sedán –que no se ha actualizado hasta ahora (Continental Flying Spur) y un coupé convertible (Continental GTC). Hasta hace algunos meses, todos estaban disponibles únicamente con el motor W12 (sí doce cilindros) Biturbo de 567 Hp y 516 Lb-pie de torque, pero en busca de una línea más amigable con el medio ambiente, recientemente introdujo un nuevo motor V8 de 4.0L también con doble sobrealimentación turbo con sistema de desconexión de cilindros y una potencia de 500 Hp y 487 Lb-pie de torque (disponible por ahora solamente en GT y GTC). Otra gran diferencia la hace la transmisión que deja a un lado las seis velocidades del W12 y adopta la excelente caja ZF de ocho relaciones que además de ayudar a explotar mejor el torque del motor, ayuda con el consumo de combustible.
Estéticamente se distingue por la parrilla en color cromo negro, entradas de aire en negro, los emblemas de la famosa B de Bentley con fondo rojo y las salidas de escape en forma de ocho en lugar de ovales.
Por dentro, la atención al detalle, la manufactura y excelentes materiales que encontramos en todo producto de la fábrica de Crew, Inglaterra también se hacen presentes, además de los cristales dobles para aislar mejor el ruido exterior y el sistema de navegación con mapas de Google.
Este modelo se presentó hace casi un año en el Autoshow de Detroit en 2012 (estamos a escasas semanas del siguiente). Su arribo a México fue hace algunas semanas atrás y Autocosmos.com es el primer medio de Latinoamérica en probarlo como se debe.
Afortunadamente no es el primer producto que podemos probar de la marca, así que tenemos las herramientas para determinar si se trata de un verdadero Bentley con todo y que perdió cuatro cilindros.
Como comentábamos anteriormente, el ensamble y calidad de materiales del Continental GT V8 2013 es impecable, como el de ningún otro auto “comercial”. Sólo marcas como Porsche y Rolls-Royce pueden acercársele.
Para echar a andar el poderoso V8 Biturbo, sólo necesitamos portar la llave (también de impecables terminados) y presionar el botón de encendido localizado en la consola central. Una vez haciendo esto, se escucha un ligero rugido que nos recuerda que estamos tratando con 500 Hp y suficiente torque como para mover un camión.
Seleccionamos la posición D de la transmisión, quitamos el freno de mano eléctricamente operado y arrancamos. En el modo más suave de la suspensión el aislamiento del camino es perfecto pero si seleccionamos el modo más firme, podemos aspirar a un manejo más deportivo. Como nuestra prueba fue en pista, nos enfocamos más a probar la aceleración y agarre en curvas y no nos preocupamos tanto por el consumo de combustible. El sistema de desconexión de cilindros nunca trabajó o es imperceptible el cambio.
La aceleración de 0 a 100 Km/h lo logra en 4.8 segundos, bastante impresionante para un auto de 2,750Kg. En parte esto se debe a la tracción integral que distribuye la fuerza del motor en un 40:60 por ciento entre el eje delantero y trasero respectivamente.
Dicho sistema también sale a relucir en las curvas pues ofrece muy buen agarre –con una ligera tendencia al subviraje como en todo auto con tracción integral. El sonido del motor es discreto (nada que ver con los V8 sobrealimentados del Shelby y Camaro ZL1) pero no por eso menos entretenido. Se nota que los ingenieros de la marca quisieron entregar una experiencia deportiva, elegante y lujosa como en su hermano mayor con el motor W12 Biturbo.
Conclusión
Si bien el integrante “menor” de la familia Continental cumple con las credenciales de Bentley con un motor más pequeño, eficiente y una transmisión más moderna, nos pone un poco nostálgicos el hecho de que hayan logrado casi el mismo desempeño que el primer Continental bastante muchos menos recursos naturales y que desgraciadamente la industria próximamente dejará de ofrecer motores con más cilindros –que para nuestro gusto tienen un algo que les da mucho más sabor al manejarlos.
Como pudimos comprobar en la pista, el peso de este vehículo lo convierte en una opción meramente para carretera y ciudad pues su desarrollo estuvo enfocado a estas dos situaciones de manejo. La aceleración que ofrece, agarre y confort lo hacen una excelente opción para quienes buscan de un “juguete” para salir de fin de semana con la familia, (una pareja y un par de niños viajan más cómodamente), devorando kilómetros con facilidad y disfrutar de una sinuosa carretera.
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