La clase B de Mercedes-Benz ha logrado vender más de 2.5 millones de vehículos a razón de ser espacioso, innovador y seguro. Sin embargo un grupo de estudiantes (trainees) de Mercedes-Benz cumplieron la hazaña de construir un Clase B con la singularidad de portar un motor de 5.5L V8 con 388 hp y una transmisión de siete cambios automática con tracción trasera.
Este auto denominado Clase B 55 surgió de la iniciativa del directivo de la planta de Rastatt en Alemania, Peter Wesp, quien propuso a su equipo de trabajo desarrollar una versión especial sobre la base de un Clase B. La persona que aceptó el reto fue Andreas Würz, Jefe del Departamento de Entrenamiento Técnico Vocacional, quien con 12 trainees especialistas en mecánica de producción e ingeniería mecánica-electrónica de autos lograron la hazaña de acoplar el enorme motor V8 en un tradicional clase B que normalmente porta propulsores de 2.0L.
En cuanto a diseño y dimensiones se refiere el Clase B 55 se mantiene prácticamente intacto. Para diferenciar la versión se emplearon detalles deportivos clásicos de Mercedes-Benz tanto en el exterior como en el habitáculo.
El Mercedes-Benz Clase B 55 tiene un peso de 1620 kg, es decir sólo 180 kg más que el modelo original.