El gobierno de Estados Unidos enunció por medio de Steven Chu, titular del Departamento de Energía, que se otorgará un préstamo de 7.965 millones de dólares enfocados al desarrollo de nuevas tecnologías para la reducción de emisiones contaminantes.
En el caso de Ford recibirán 5.900 millones de dólares, que representa el monto más alto de las tres empresas, debido principalmente a que la marca del óvalo azul no pidió ayudas gubernamentales en pasados meses. El préstamo será destinado a financiar su programa de vehículos eléctricos, que incluyen a la Transit Connect para el 2010 y por supuesto un sedán como podría ser el Fusion.
Ford se ha comprometido en invertir cerca de $14 mil millones de dólares en Estados Unidos, en los próximos 7 años, para desarrollar tecnologías avanzadas para sus vehículos. La expectativa es que estos productos puedan alcanzar ahorros en consumo de combustibles anuales de 9500 millones de litros de gasolina para el año 2012.
En el caso de Nissan, recibe 1.600 millones de dólares, que serán destinados a modificar su planta de manufactura localizada en Smyrna, Tennessee, con miras a producir vehículos de cero emisiones y paquetes de baterías de iones de litio. Se planea que la producción comience a finales del 2012.
Las modificaciones a la planta de Smyrna incluyen una nueva fábrica de baterías y cambios en la estructura para el ensamble de vehículos eléctricos. La planta tendrá la capacidad para fabricar 150.000 vehículos de cero emisiones en un año y una capacidad anual de 200.000 baterías.
Cerrando la pinza de los distintos segmentos que se han atacado, encontramos a Tesla, para los gustos deportivos del consumidor. La marca que ha sido de las pioneras en vehículos comerciales de baterías ha recibido 465 millones de dólares, que aunque suenen poco van acorde al tamaño de la empresa. El dinero será destinado a concretar el desarrollo y producción del Model S que utilizaría una de las fábricas automotrices que han cerrado sus puertas debido a la crisis.
